La madera ya no canta: lauderos de Alto Lucero abandonan el oficio
3 minutos de lecturaPara sobrevivir, algunos arpistas y lauderos de la comunidad Cerrillos de Díaz, en el municipio de Alto Lucero, han tenido que abandonar esta actividad para dedicarse a algo más redituable e incluso emigrar a Canadá o Estados Unidos, aseguró Manuel López Andrade, coordinador general del Festival Internacional del Arpa.
Señaló que la crisis económica que se vive de manera general, sumada al encarecimiento de las materias primas para la elaboración de instrumentos musicales han ocasionado que al menos un 5 por ciento de quienes se dedicaban a este oficio lo hayan abandonado en los últimos años.
Como no hay venta de los instrumentos tienen que buscar otros medios, inclusive hay quienes han tenido que migrar; la situación es de tipo económica
Entrevistado a unas horas de que se lleve a cabo la 19 edición del Festival Internacional del Arpa, el coordinador explicó que no solo la venta sino también la calidad de las arpas ha estado en riesgo debido a que la obtención de la madera idónea para los instrumentos se ha complicado y encarecido.
Antes de manera manual los lauderos o arperos conseguían ellos mismos la madera de la región, pero ahora por los problemas ambientales ya no se puede cortar un árbol. Esto encarece porque ya se tienen que comprar en las madererías de Xalapa y además es riesgoso, porque se desconoce la calidad de la madera con la que se trabaja, pues ellos no la cortaron
Conocida internacionalmente por la elaboración de arpas de todos tamaños y diseños, en la localidad de Cerrillos viven cerca de mil 500 personas, de las cuales al menos 300 se dedican por completo a la música y 200 al arpa en específico. Son éstos quienes de unos años a la fecha han padecido más la crisis económica, ya que la venta de estos instrumentos ha disminuido de manera drástica. “La situación está muy difícil y a los músicos les cuesta mucho trabajo salir de la comunidad a venderlas y lo que hacen es tratar de comerciarlas ahí en el pueblo”.
Los arpistas también han padecido esta crisis, apunta López Andrade, ya que hay familias completas de músicos que han tenido que salir a otros municipios o estados para poder tener mayores oportunidades de trabajo. Dio a conocer que se tienen datos de artistas alteños que ya viven en el Distrito Federal y otros que viajan a las ferias nacionales para tocar en estos sitios.
“Cuando no hay ferias están tocando aquí en la región e incluso sabemos que los fines de semana están laborando en la zona costera de Costa Esmeralda, Palma Sola, Vega de Alatorre y Emilio Carranza y que se van incluso hasta Poza Rica o Tuxpan”, precisa
Ante este panorama, Manuel López Andrade hizo un llamado a la población a acudir este 23 de febrero a la comunidad de Cerrillos de Díaz para disfrutar en familia del Festival Internacional del Arpa. Las actividades comienzan a las 13:45 horas y continuarán durante toda la tarde y son completamente gratuitas.
El pueblo sigue conservando la tradición de ofrecerles a todos los habitantes ‘un taquito’ para que además de la música también disfruten de la comida tradicional y sientan la hospitalidad. Los esperamos con los brazos abiertos para que nos acompañen y puedan pasar unas horas conociendo y apoyando el arte de la comunidad
Señaló que además de las actividades musicales se tendrán a la venta los instrumentos musicales que se elaboran en la región e incluso se contará con arpas a escala que los visitantes pueden adquirir, ya sea para regalar o para adornar algún espacio de su casa u oficina.
FUENTE: DIARIO DE XALAPA