Gasoducto pone en riesgo ecosistemas arrecifales de Veracruz: Greenpeace
4 minutos de lecturaEste sábado 27 de mayo concluyó la segunda –y última– parte de la investigación a bordo del Arctic Sunrise de Greenpeace en el Golfo de México. En esta ocasión, la investigación se concentró en la zona norte de Veracruz, cerca de los municipios de Tamiahua–Tecolutla. En esta fase, participaron académicos de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias de la Universidad Veracruzana (región Poza Rica-Tuxpan), el Colectivo Interdisciplinario de Ciencia Aplicada y Derecho Ambiental, A.C., y Greenpeace México.
Para llevar a cabo estas labores, se utilizó un sumergible eléctrico tripulado por dos personas (NEMO 2) con capacidad de sumergirse hasta una profundidad de 100 m, un vehículo submarino operado remotamente (BoxFish) y un escáner de barrido lateral que permite obtener imágenes del fondo marino. Entre los hallazgos más importantes realizados por la expedición se destacan:
Un arrecife a 70 metros de profundidad a más de 15 km mar adentro de la desembocadura del río Tecolutla, donde se observó la presencia de varias especies de peces arrecifales, incluyendo especies de importante valor comercial, además de corales látigo, esponjas y corales blandos.
Diferentes estructuras arrecifales a más de 50 m de profundidad, en las que se observaron peces, calamares, estrellas de mar, esponjas, corales látigo, corales blandos y al menos una especie de coral escleractinio, es decir, coral duro.
Algunos de los arrecifes encontrados están en el umbral entre los arrecifes someros y los arrecifes mesofóticos por lo que comparten características de ambos ambientes; un ejemplo de ello es el –recientemente reportado– arrecife Tamiahua, que inicia a 25 m de profundidad y el arrecife Corazones. Ambos se localizan entre los polígonos de un área natural protegida (Área de Protección de Flora y Fauna Sistema Arrecifal Lobos-Tuxpan); ambos actualmente carecen de protección e incluso se sabe muy poco de su riqueza biológica, así como de sus bienes y servicios ecosistémicos.
«Con la información recopilada podemos asegurar que hemos documentado nuevos ecosistemas arrecifales nunca antes vistos ni estudiados, ya que no se había llegado a tal profundidad en el mar de la zona. Como resultado de esto, sabemos que se requiere de planes de manejo, acciones y herramientas de conservación. Con base en diversos estudios, las especies de coral que hay en México crecen en promedio 1 cm al año, por otra parte, los procesos de erosión juegan un papel importante en el desarrollo de los arrecifes de coral; por ello es importante encontrar un equilibrio entre acreción y erosión», dijo Jacobo Santander Monsalvo, del Colectivo Interdisciplinario de Ciencia Aplicada y Derecho Ambiental (CICADA).
Lo que se observó durante la investigación es que los ecosistemas arrecifales al norte del estado se encuentran más lejos de la costa y a menor profundidad.
«Hoy más que nunca es importante proteger estos ecosistemas arrecifales, ya que brindan protección a las costas y son el refugio de diferentes especies, muchas de ellas de valor comercial, lo que permite la subsistencia de las comunidades pesqueras de Veracruz . Es importante tomar en cuenta el principio de precaución y protegerlos ante la amenaza de proyectos como el gasoducto Puerta al Sureste que fácilmente podrían acabar con estos ecosistemas en poco tiempo», declaró Viridiana Lázaro, campañista de biodiversidad y coordinadora de la investigación de Greenpeace México.
Por ello, desde Greenpeace México se invita a las personas a firmar la petición para exigir a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) a que protejan los arrecifes, su biodiversidad, el equilibrio que proveen para el ambiente y los bienes naturales que son el sustento de miles de personas.
Greenpeace México también ha informado sobre la próxima construcción del gasoducto Puerta al Sureste, el cual pretende llevar gas desde Texas hasta Tuxpan, Coatzacoalcos y Dos Bocas, bordeando la costa de Veracruz en el Golfo de México. Esto pone en grave peligro los ecosistemas arrecifales protegidos y los que aún no cuentan con esa protección en Veracruz, debido a la constante amenaza que representan tanto las maniobras de construcción, como los posteriores accidentes, fugas y explosiones, las cuales son comunes en este tipo de infraestructura. Por tal motivo la organización llama a la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente (ASEA) a no aprobar la construcción de este gasoducto.
La organización anunció que los resultados definitivos de la investigación serán presentados en septiembre de 2023.