Astronautas dicen que el confinamiento hay que vivirlo como una misión
3 minutos de lecturaLos millones de personas que viven hoy confinadas para frenar la COVID-19 forman “parte de una misión”, un desafío que “afrontamos como planeta”, y tener en mente ese objetivo es fundamental para ayudarnos a afrontar cada día. Palabra de astronauta.
Y los astronautas saben bien lo que es pasar meses confinados en la Estación Espacial Internacional, que se asemeja en espacio a un avión jumbo de los que transportan hasta 500 personas.
La Agencia Espacial Europea (ESA) organizó este jueves un evento por internet con la participación de astronautas durante el que hablaron de su experiencia en el espacio y cómo lidiaron con un confinamiento que, para algunos, llegó a durar más de seis meses.
El mensaje común fue la importancia de sentirse parte de una misión, como si se estuviera en el espacio, pero también señalaron la importancia de crear una rutina diaria, mantener el contacto con amigos y familiares por teléfono o internet y cuidarse uno mismo y a los demás.
Cada uno desde su hogar y a través de Skype, los astronautas se refirieron a los ancianos, a los que viven solos o lo hacen con familia en apartamentos pequeños, para quienes esta situación puede ser especialmente dura.
La astronauta italiana Samantha Cristoforetti recordó a uno de sus héroes Michael Collins, el primer astronauta que estuvo solo en el módulo de mando orbitando nuestro satélite mientras Neil Armstrong y Buzz Aldrin pisaban por primera vez la Luna.
Como pasó con Collins “lo importante es sentirse parte de una misión” y “todos somos ahora parte de esta batalla”, un “desafío que estamos afrontando todos como planeta”, algunos en primera línea, pero también “nosotros tenemos nuestra parte” quedándonos en casa y pensar en ello “te da fuerza para hacer el sacrificio”.
Una misión con “un objetivo preciso, “quedarnos en casa” y confiar en las personas que están trabajando para encontrar una solución para el Covid-19, agregó el francés Thomas Pesquet.
Además es fundamental establecer una rutina diaria y seguirla para “normalizar una situación que no es normal”. Crear una rutina da “un cierto sentimiento de control” y una “actitud positiva”, según el británico Tim Peake, quien aseguró que en la Estación Espacial la planificación “es muy estricta”.
Trabajar, tener momentos de ocio, objetivos como ordenar la casa o hacer con tu familia algo que llevabas mucho tiempo queriendo hacer, aunque sea en casa, pueden ser algunas de esas tareas diarias.
Y no olvidar el ejercicio físico, destacó el exastronauta de la Nasa Tom Jones, “que te hace sentir mejor, con la mente fresca” y te da tiempo para pensar en tus prioridades, “qué estas haciendo y cómo lo puedes hacer mejor”.
Cuando consigues uno de esos pequeños objetivos diarios “te invade una sensación de satisfacción que te da la energía para emprender la siguiente”, aseguró el francés Jean-Francoise Clervoy.
Por su puesto, es normal sentirse a veces estresado, sobre todo las familias que viven en pequeños apartamentos, por eso es bueno, como los astronautas en la Estación Espacial: tener un pequeño lugar propio. El de ellos es la zona de dormir, del tamaño de una cabina telefónica, explicó Cristoforetti.
Durante su estancia en el espacio los astronautas no están aislados de sus familias y amigos, pueden hablar con ellos , escribir correos electrónicos, incluso recibir algún pequeño regalo cuando llega un nave de cargo.
De la misma manera, sobre todo para los que viven solos, recomiendan mantener el contacto por teléfono o internet con los seres queridos, que sepan lo que estamos haciendo, pero también interesarnos por ellos.
Sin olvidar los gestos de solidaridad, como la gente que aplaude cada día al personal sanitario o los que tocan música desde la ventana para sus vecinos, recordó el director general de la ESA, Johann-Dietrich Wörner, actitudes que -consideró- “realmente están cambiando nuestra sociedad”.
Y el día que acabe el confinamiento, será importante que todo el mundo piense en lo sucedido y aprender de lo que hemos vivido, concluyó Peake.