Vecinos de El Tejar sufren la sequía del río Jamapa
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Hace 45 años, Anastasia Caballero jamás imaginó ver a su vecino el río Jamapa casi secarse, pues en aquellos años, recuerda, éste era reconocido entre los pobladores por su abundancia y limpieza.
La adulta mayor de actualmente 75 años de edad que habita una vivienda ubicada en las faldas del río Jamapa en El Tejar municipio de Medellín de Bravo compartió para Imagen de Veracruz que el agua del río era tan limpia que la utilizaba tanto para lavar ropa como para beberla.
Hace décadas, recuerda jamás haberse enfermado por consumirla para hidratarse, sin embargo actualmente esa posibilidad se esfumó, pues compartió que se encuentra lleno de lirio y maleza, además de que ha visto flotar por el agua desde bolsas de basura hasta animales muertos.
Anastasia dijo que incluso apenas 15 años atrás nunca imaginó ver al río Jamapa seco, sin embargo señaló que el mal manejo del agua lo está llevando a que año con año se extinga poco a poco. Además, explicó que son los «métodos» que utilizan las grandes empresas los que están generando las sequías en algunas partes del afluente.
Lo anterior dado a que desde su casa señaló dos especies de «murallas» creadas con decenas de costalillas llenas de arena que tienen el objetivo de evitar que el agua de la zona en la que se ubican las plantas siga bajando.
Pese a que el estiaje, de acuerdo a lo informado por las autoridades, dio inicio el 1 de febrero, fue un mes después, en marzo, que Anastasia dijo empezó a quedarse sin agua y alertó que no será hasta aproximadamente 5 meses después que logre recuperarse.
«En marzo se empezó a secar el río Jamapa, ya es en agosto cuando empieza a medio recuperar su nivel y digo medio porque el año pasado nada más logró subir a medio barranco cuando antes se iba al filo de cada extremo, pero ahorita ya no hay tanta agua.
La señora de 75 años de edad, Anastasia Caballero, hizo un llamado a las autoridades para dar la atención que el abastecedor del 45 por ciento de la población en Veracruz, Boca del Río y Medellín de Bravo merece y requiere, pues alertó que de seguir posponiendo su mantenimiento las consecuencias podrían empeorar.
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