Conmemoramos el triunfo del pueblo
6 minutos de lecturaEsteban Ramírez Zepeta
La vida que enfrentamos representa un cúmulo de enormes retos, la pandemia nos deja una profunda enseñanza de qué somos vulnerables y tenemos la responsabilidad de buscar la protección de todos los seres humanos.
Debemos aprender que es necesario recobrar los valores que nos dan origen y destino, a través de la solidaridad, fraternidad y respeto.
Al conmemorar el segundo aniversario del triunfo de la sociedad mexicana, somos respetuosos del dolor y necesidades de un pueblo que se agobia como consecuencia de la pandemia del Covid-19.
Las afectaciones económicas, de salud y valores, quedarán en la historia de nuestro país y del mundo entero. Sin embargo, no podemos ni debemos olvidar un acontecimiento de enormes dimensiones sociales y que es resultado de muchos años de lucha perseverante contra un sistema corrupto. 30 millones de voces gritaron al unísono ¡ya basta!
En las elecciones de 1988, cuando el ilegítimo presidente Carlos Salinas de Gortari llegó al poder y surgió una izquierda poderosa encabezada por Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo y Heberto Castillo, entre otros grandes luchadores sociales, quienes obtuvieron el mayor reconocimiento del pueblo mexicano, sin embargo la caída del sistema electoral originó que se cometiera un fraude vergonzoso y avalado por el Partido Acción Nacional a través de una serie de concertacesiones, concepto que se acuñó como acuerdos oscuros entre el Partido Revolucionario Institucional y los representantes de la derecha. Fue precisamente el Diputado Federal, Diego Fernández de Ceballos quien propició en el Congreso de la Unión la quema de boletas de esas elecciones, borrando así un testimonio del mayor fraude en la era moderna.
A partir de ahí, los integrantes de la izquierda mexicana tuvieron que soportar heroicamente persecuciones, asesinatos y encarcelamientos, por parte de un sistema que se negaba ceder el poder por las profundas raíces de corrupción que forjaron a lo largo de muchas décadas.
La lucha fue tomando mejor rumbo, cuando en el tercer informe de gobierno de Ernesto Zedillo, el 1 de septiembre de 1997, el Diputado Porfirio Muñoz Ledo dirigiera mil 69 palabras. Destacando
“Saber gobernar es también saber escuchar y saber rectificar. El ejercicio democrático del poder es, ciertamente, mandar obedeciendo. Lo que en última instancia significa el cambio democrático es la mutación del súbdito en ciudadano”, al final, le recordó a Zedillo;
“Nosotros, que cada uno somos tanto como vos y todos juntos valemos más que vos”.
Esto dio apertura a una nueva etapa democrática en la transición del Poder Legislativo ante el Poder Ejecutivo, no más sometimiento.
La llegada del primer presidente de la República de origen panista o neo panista en el año 2000, fue sin duda parte de las concertacesiones entre el PRI y el PAN. Tras la reforma constitucional del artículo 82 en 1990, se permitió que un hijo de extranjero pudiera ser presidente de la República, al modificarla por propuesta de la fracción parlamentaria del PAN, fue hecha a la medida de Vicente Fox.
En el mitin virtual del 5 de julio de 2020 a nivel nacional, en el marco de la conmemoración del Segundo Aniversario del triunfo del pueblo, el presidente nacional de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar expresó.
“Es un orgullo ser parte del Movimiento de Regeneración Nacional que llega con el corazón emocionado y sobretodo con la voluntad de mirar al pueblo olvidado a lo largo de la historia, sabemos que estamos del lado correcto a la historia en la lucha por la dignidad, la libertad los derechos fundamentales, por un estado de bienestar por un México para todos, no sólo para unos cuantos”.
El presidente del Instituto de Formación Política de Morena nacional, Rafael Barajas frente a una gran cantidad de militantes reunidos virtualmente, consideró:
“La buena noticia es que el pueblo de México si sabe hacer revoluciones, supo hacer la Independencia, la Reforma y la Revolución Mexicana y hoy impulsa a la Cuarta Transformación. Somos un movimiento vivo tenemos resiliencia y sabemos sortear la adversidad.La mala noticia es que ganamos el gobierno, pero no necesariamente ganamos el poder, porque la reacción mexicana también sabe hacer contra revoluciones y esto es histórico, los conservadores encontraron el camino para hacer de lado a los Insurgentes y crear un imperio con Iturbide, aí como convertir al liberal Porfirio Díaz en un dictador sanguinario. También hicieron del régimen de la Revolución Mexicana la base de la contrarrevolución neoliberal. La mala noticia es que la derecha mexicana está furiosa y no se resigna a la derrota, es la que nunca pierde y cuando pierde, arrebata”.
El diputado Mario Delgado por su parte hizo un balance de los grandes avances legislativos, asimismo Ricardo Monreal expresó un mensaje solidario reafirmando el compromiso de Morena para lograr el impulso democrático y no permitir el regreso de la derecha y de aquellos que representan gobiernos de corrupción.
El presidente nacional de Morena, cerró expresando:
“Este es un gran mitin que muestra una gran unidad de nuestro partido, hemos iniciado la conmemoración del segundo año del triunfo del pueblo de México, lo hacemos con mucha alegría, pero también reconociendo el dolor que sufre nuestra patria por los que están enfermos, por aquellos que desafortunadamente han sido contagiados. La conmemoración tiene como propósito reconocer a nuestros militantes, a los que ya no están con nosotros y a muchísima gente que sembró la semilla, algunos la vieron cosechar y otros desafortunadamente ya no están. Son los militantes quienes merecen todo nuestro reconocimiento, los héroes y las heroínas que están en la sección electoral, en los campos pesqueros y en las comunidades indígenas, los que están en la zona rurales y en las aulas universitarias, quienes son empleados públicos y maestros de telesecundaria de primaria y de jardín de niños, que dan clases en los niveles de educación media y también en las universidades son todos ellos los que hicieron posible el cambio verdadero”.
Como veracruzano, militante de Morena y aspirante a la Dirigencia Estatal de mi partido, estoy muy orgulloso de ser parte de esta gran lucha, ahora nos corresponde seguir peleando para mantener inquebrantable la convicción de erradicar la corrupción y demostrarle al pueblo de México y Veracruz que sí se puede gobernar con austeridad, honradez y transparencia.
Me siento muy orgulloso de ser testigo de esta etapa histórica que representa la fuerza de un pueblo que no habrá de permitir que regresen los círculos de mafias que sólo ven beneficios para ellos y sus grupos a costa de perjudicar a los más pobres y vulnerables.
No celebramos porque estamos convencidos que es un momento de ser prudentes, pero si conmemoramos como una fecha histórica, lo que de ahora en adelante será la cuarta transformación como eje del futuro de México.
Reafirmo mi sincera convicción de reconocer el liderazgo y grandeza de Andrés Manuel López Obrador, el luchador social, militante aguerrido, valeroso mexicano y hoy con orgullo y compromiso histórico nuestro Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, quien nos pone el ejemplo de su pensamiento y acción:
¡Por el bien de todos, primero los pobres!